La pornografía

La pornografía es la exposición de contenidos sexuales, en forma obscena y con la intención de excitar. La pornografía no es arte ni tampoco mero erotismo o sensualidad. La escultura del beso, de Rodin, o la Maja desnuda, de Goya, son sensuales, pero no son pornográficas. La pornografía es pura muestra de actos sexuales, donde rebosan las imágenes sadomasoquistas, la pedofilia y otras aberraciones, individuales o en grupo. Es una industria millonaria que va de la mano de la prostitución, que vende sexo cosificando y humillando al hombre y a la mujer. Es explotación ruin de los seres humanos, y sobre todo de la mujer.
La pornografía sigue siendo un tema controvertido. El alto consumo de pornografía puede alterar la estructura y el funcionamiento de nuestro cerebro provocando que surja la adicción o el comportamiento adictivo. Además de que tiene impacto en las conductas sexuales y en las relaciones de género. El efecto de la pornografía es negativo porque puede llegar a tratar complicaciones en la vida de una persona ya que puede llegar a ser adictiva.
El uso de internet a avanzado por lo tanto el uso de la pornografía también está más extendido. El 65% de personas que consumen internet también consumen algún tipo de página sexual, internet se ha consolidado como una herramienta para impulsar la accesibilidad al consumo del porno
La mayoría de los adolescentes aprenden de sexo gracias al porno porque la educación sexual en la mayoría de los países es mínima, la pornografía nos vende que las relaciones sexuales son perfectas y no solo la pornografía sino multitud de películas que vemos a diario y en muchos videos de este tipo se puede ver violencia que en muchas ocasiones se asocia al placer.
Es importante que si se ve pornografía sea con crítica y con conocimientos previos sobre educación sexual para no hacerse ideas erróneas. Además, es fundamental que el sexo deje de ser un tema tabú y que le demos la importancia que requiere.